El rol de un hombre es más activo en estas circunstancias, aunque las cosas pueden variar.
Si recibimos miradas con frecuencia estamos siendo invitados a acercarnos.
Ahora es el momento de iniciar conversación.
Debemos ser crativos para ir generando interés progresivamente.
Llegados a este punto debemos empezar a usar algo de kino (contacto físico).
Una vez hemos generado la suficiente confianza e interés el beso es el paso siguiente y el punto de partida de la seducción.