Retirar todas la basura, piedras y yuyos que haya en el terreno donde se hará la huerta.
Marcar los canteros con estacas e hilo, dejando aproximadamente 30 cm. de distancia entre uno y otro para poder caminar comodamente.
Elegir un lugar que no esté cerca de grandes árboles, para que no le quiten sol y nutrientes a la tierra de la huerta.
Controlar regularmente la presencia de plagas.
Sembrar las semillas.