Se comienza mezclando una medida de harina con 1/2 medida de sal, incorporando agua hasta obtener una masa que no se pegue en las manos y se pueda modelar.
Si la desea de colores, agregue al agua unas gotas de colorante para torta o tempera. En caso de usar tempera debe cuidar que los niños no se lleven la masa a la boca.
También puede dejar la masa blanca, y luego de armar las formas y dejar que se sequen, se pintan con témperas, pinturas acrílicas, u otras.
Por último, si quiere modificar la textura, puede agregar pelotitas de telgopor, arroz o piedritas.