Siempre mantener la calma. Es necesario actuar y no desesperarse. Es por ello que si está con su familia, una persona debe ser la que tranquilice a los demás y les indique que hacer.
Deben cortarse inmediatamente los suministros de electricidad, y si es posible los de gas y agua para evitar complicaciones. Más aún si se piensa en evacuar la vivienda.
Si el agua ingresa a la vivienda, lo ideal es evacuarla y buscar una zona alta en otro lugar, aunque algunas personas prefieren continuar allí y ubicarse en el primer piso, por ejemplo, para escapar del agua.
Si la decisión es quedarse, se puede intentar trasladar hacia zonas mas altas todo lo que se pueda rescatar, ya sea artículos electrónicos, elementos personales o cualquier cosa que se quiera preservar.
Un botiquín de primeros auxilios es imprescindible en estos casos. Habrá que tener en cuenta que el agua puede introducir a nuestras viviendas insectos y enfermedades diversas, por lo que es necesario siempre contar con los elementos adecuados para contrarestarlas. Muchas veces no es una buena opción quedarse en la casa, sino evacuar hasta que el agua baje.